Sobredosis de Absurdo.

Mientras los conservadores neo fascistas se empeñan en que el olvido se adueñe de la gente, olvidando un pasado que ellos mismos tiñieron de sangre con demasiados años de feroz dictadura, los obispos se ponen nerviosos porque se quieren sacar crucifijos de las aulas. Sobra decir que estos dos grupos de pirados son lo más lejano a Cristo y su hipocresía los condenaría al infierno en caso de existir este, pero es de juzgado de guardia que clamen al olvido cuando ellos andan canonizando a curas y monjas de su bando fascista muertos en la guerra civil.

Ocurre que cuando alguien cree que un tomate gobierna el Universo y lo manifiesta, es un loco. Pero los que creen en un Dios que tolera que sus supuestos mensajeros en la Tierra sean la peor calaña, como son millones, no son tachados de locos. Tiene cojones la cosa. Cada uno que crea lo que le salga de los riñones pero que no adoctrinen en los colegios con credos y dioses que tienen las mismas posibilidades de existir que yo de cambiarme de sexo. Muy triste es que en pleno siglo XXI se les metan a los niños desde bien pequeños, ideas enfermas, rocambolescas y sin fundamento alguno más que el del negocio que hace el Vaticano a base de mentir, imponer y aprovecharse de la ignorancia imperante.